miércoles, 26 de noviembre de 2008

Quien habla último…

Un vendedor, un empleado administrativo y el gerente van a almorzar y, tirada en el suelo, encuentran una antigua lámpara de aceite. La frotan y aparece un Genio envuelto en una nube de humo.

- Como generalmente otorgo tres deseos, les voy a dar uno a cada uno, dice el Genio.

- ¡A mi primero! ¡Yo primero! Porfía el empleado administrativo. Quiero estar de vacaciones en el Caribe y … ¡Puff! …¡Desaparece!

Sin salir de su asombro, el vendedor grita:

- ¡Ahora a mi! … Quiero estar en Hawai, descansando en la playa con mi masajista personal, con una inagotable provisión de cerveza y con una top model. Y … ¡Puf! … ¡Desaparece!

- Bueno, ahora te toca a ti, le dice el Genio al gerente.

- Quiero que esos dos vuelvan a trabajar después del almuerzo, dice el gerente.

Conclusión:

Siempre hay que dejar que el jefe hable primero.

1 comentario:

Rebe dijo...

Esta muy tuanis la historia ... y en realidad esto de no revelar los planes es super importante.

A veces las "acciones" inesperadas son geniales ... eso me lo dijeron un día de estos, y con exelentes resultados.

Excelentes todas las historias